domingo, 2 de septiembre de 2007

Como una película de Tim Burton

Tim Burton es un mago de las películas tenebres llenas de oscuridad y de penunbra; pero también de aquellas películas que sin duda te dan ganas de vivir y completamente luminosas. Esto es lo que hemos podido ver por ahora de Colombia. Luces y sombras que no quiere siempre decir cosas malas y buenas.

La parte tenebrosa de este relato van a ser las ciudades que hemos visitado Cali, Armenia y en mucho menor medida Pasto. Como en una escena de Sleepy Hollow todo es gris o negro, sobre todo de noche con un inefectivo sistema de alumbrado. La gente nos transmite una sensación de lejanía y, como cualquier personaje en la pelicula antes descrita, de penumbre y miedo.

Uno de los episodios más tenebrosos me sucedió en el centro de Calí cuando una mujer, completamente desquiciada por las drogas (se veía claro por su comportamiento y su delgadez) me empezó a llamar guapo y me quería besar.

De todas formas, esta situación describe bien lo que estoy seguro que sucede (ya que lo hemos experimentado) y lo que nos lleva otra vez a la similitud con otro de los personajes de Burton, Eduardo Manos Tijera, donde la imagen no representan la verdadera realidad. Toda la gente con la que hemos hablado en Colombia tuvieran buena imagen o no la tuvieran, nos ha tratado con mucha educación y hospitalariamente. Puede ser que también la existencia de un cambio tan grande entre los coloridos (en todos los sentidos) indigenas y los colombianos también te impacta de tal forma que tienes que tener unos días de colchón para habituarte.

La parte Big Fish o luminosa del pais es sin duda el campo. Cuando viajas con el autobus y observas el extenso verde apenas sin explotar con grandiosos arboles y con casas que complementan estos lugares sólo tienes la opción de aplaudir y ponerles en la cabeza de comprensión de la situación actual (no socialmente por supuesto). Da igual que pases por una zona de selva, de bosque o de prado; todo el campo colombiano parece estar muy por encima de las imágenes que mi memoria tiene de cualquier otro país.

De hecho, ahora estamos en un bello pueblo de la zona cafetera, llamado Salento, que ya estamos empezando a disfrutar. Ya os contaremos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece de puta madre vuestro decision y cambio de planes. Cuidaros y seguir contandonos vuestras aventuras.

Cursor dijo...

Me da envidia el viaje que emprenden, aunque me refiero a envidia de la sana .... lastima no haber encontrado esta bitacora antes, pero intentare ponerme al dia .... Salu2